Cinco figuras emblemáticas del Pays Vasco, que encarnan la riqueza de su terroir fascinante, emergen con esplendor. Cada uno de ellos, ardiente defensor de una tradición viva, infunde una pasión identificable en su arte y su saber hacer. *La música, la cocina, la artesanía y la ganadería* se unen en un torbellino rico en historia y emociones. Su búsqueda de conservación e innovación es testimonio de una identidad cultural vibrante, perpetuando saberes ancestrales mientras los adaptan a las exigencias contemporáneas. A través de sus singulares trayectorias, estos vascos nutren un patrimonio auténtico, que da testimonio de un vínculo indestructible con esta tierra mítica que los moldea e inspira.
Punto clave
1. Ganadero de queso
Apasionado de la ganadería ecológica, combina tradiciones y modernidad en sus productos lácteos.
2. Historiador local
Pone en valor el patrimonio arquitectónico vasco a través de sus relatos.
3. Artista callejero
Expresa el alma vasca a través de obras comprometidas en los pueblos.
4. Chef cocinero
Ofrece una cocina innovadora, celebrando los s sabores locales.
5. Apasionado de deportes tradicionales
Practica y enseña los juegos vascos, perpetuando la cultura.
El Maestro Quesero #
Antoine, eminente artesano quesero, ha decidido dedicarse a la ganadería biológica. Trabajando en el pintoresco pueblo de Saubion, produce quesos renombrados, como el ossau iraty, emblema de la gastronomía vasca. La pasión de Antoine por los productos auténticos lo ha llevado a abrir su granja a los visitantes, permitiendo así una inmersión en las tradiciones queseras. A través de talleres prácticos, transmite su valiosa experiencia a los visitantes fascinados.
La Chef Cremosa #
Marianne, chef de cocina, conjuga con maestría su amor por la gastronomía y los productos locales. Su restaurante, ubicado en Bayona, es un verdadero homenaje a los s sabores del Pays Vasco. Las recetas elaboradas por Marianne, como la sopa de pescado simpática, combinan simplicidad y refinamiento. Cada plato cuenta una historia, la de la tierra y de las mujeres y hombres que la hacen vivir. Su compromiso con el circuito corto favorecerá el desarrollo de los pequeños productores locales.
La Artesana Vitralista #
Lucie, apasionada por el arte del vitral, ha elegido instalarse en Biarritz, donde ha abierto un taller inspirador. Sus creaciones, impregnadas de luz y colores vibrantes, reinterpretarán las tradiciones vascas aportando un toque contemporáneo. Lucie se destaca por su capacidad de combinar técnicas ancestrales y diseños modernos, atrayendo la atención de los amantes del arte. Cada pieza que realiza refleja su amor por el patrimonio cultural vasco, enriqueciendo el paisaje artístico local.
El Gesto Deportivo #
Hugo, ferviente apasionado de la pelota vasca, dedica su vida a la transmisión de los valores de este deporte ancestral. Joven entrenador en Saint-Jean-de-Luz, inicia a los niños en esta disciplina rica en historia. A través de sesiones lúdicas y pedagógicas, Hugo perpetúa el espíritu comunitario y el trabajo en equipo. Su sueño consiste en organizar un torneo local, celebrando la cultura vasca más allá de las fronteras.
El Artesano del Terroir #
Isabelle, productora de aceite de oliva, encarna el vínculo entre tradición y modernidad. Ubicada en Labastide-Clairence, su granja se especializa en la producción de un aceite de oliva excepcional, celebrado por su sabor afrutado y su suavidad. Isabelle se empeña en respetar los ciclos naturales, cultivando sus olivares con esmero. Cada botella de aceite es un reflejo de su pasión y su compromiso con un agroecosistema sostenible.