EN BREVE
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A medida que se acerca el verano, con los pies en la arena y el sol en la piel, tendemos a considerar las cremas solares como aliados imprescindibles para proteger nuestra piel de los efectos nocivos de los rayos UV. Sin embargo, detrás de la aparente benevolencia de estos productos se esconde una realidad inquietante: los protectores solares pueden tener efectos devastadores en nuestros ecosistemas marinos. Los corales, los peces y toda la biodiversidad costera suelen sufrir en silencio los residuos químicos que dejamos tras un día de playa. Este verano es crucial explorar esta cuestión para tomar conciencia de los peligros ocultos que infligimos a nuestras costas, pensando al mismo tiempo en alternativas más respetuosas con la salud de nuestro planeta.
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En la playa es fundamental protegerse de los rayos UV para evitar quemaduras solares y el riesgo de cáncer de piel. Sin embargo, nuestras acciones para proteger nuestra piel podrían tener consecuencias nocivas para el medio marino.
Un cóctel tóxico para los océanos #
Cuando se aplica sobre la piel, el protectores solares disolver parcialmente en agua. Esta acción libera compuestos químicos que pueden ser tóxico para la vida marina. Los estudios han descubierto que ciertos elementos que se encuentran en estas cremas, como la oxibenzona y el octinoxato, tienen efectos devastadores en los arrecifes de coral.
Las marcas se están volviendo ecológicas, pero ¿es suficiente? #
Sensibilizadas por las cuestiones medioambientales, cada vez más marcas de cosméticos recurren a formulaciones denominadas “ecológicas”. Sin embargo, aunque algunas de estas nuevas cremas son menos tóxicas, ninguna de ellas puede describirse como completamente neutral para el medio ambiente. Esta afirmación aún debe demostrarse mediante rigurosas pruebas de laboratorio independientes.
La ciencia aborda el problema #
En Niza, diez investigadores analizan el impacto de distintas cremas solares sobre las células de anémona, representativas de la fauna mediterránea. Su objetivo es determinar qué productos son realmente menos dañinos. A falta de regulaciones estrictas en Europa, estas pruebas científicas son esenciales pero no suficientes para regular la industria de las cremas solares.
¿Qué hacer para proteger tu piel y el planeta? #
- Optar por protectores solares minerales que utilizan filtros como el dióxido de titanio o el óxido de zinc. Generalmente son menos tóxicos para el medio ambiente.
- Opte por usar ropa protectora, como camisetas anti-UV.
- Evite exponerse al sol durante las horas de más calor, entre las 11 y las 16 horas.
- Busque productos certificados por sellos independientes que garanticen un menor impacto ambiental.
Elegir protección solar que minimice su impacto sobre el medio ambiente requiere un esfuerzo de investigación y vigilancia. Los consumidores deben descifrar las etiquetas y favorecer soluciones alternativas para proteger su piel sin dañar los ecosistemas marinos.