EN RESUMEN
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Frente a una demanda creciente, la asociación Vacaciones y Familias en Charente-Maritime se encuentra en una situación delicada. Con solo ocho voluntarios para dos empleados, la capacidad de acogida y la organización de las salidas en vacaciones para las familias desfavorecidas están siendo puestas a prueba. Los responsables de la asociación alertan sobre la necesidad de atraer a nuevos voluntarios para asegurar un apoyo efectivo a las familias que necesitan ayuda para salir de vacaciones.
Una necesidad urgente de refuerzo #
Floriane Bobin y Francelise Laventure, respectivamente empleada y secretaria adjunta de la delegación charentaise-maritime de la asociación, no ocultan su inquietud. Faltan voluntarios en la asociación es su amarga constatación. Francelise no escatima en humor al precisar: «Una veintena, para empezar, estaría bien», pero sabe que tras esta frase se oculta una necesidad real. Con solo ocho voluntarios, se torna difícil organizar eficazmente las actividades en un departamento tan vasto como Charente-Maritime.
Vacaciones accesibles para todos #
El papel de la asociación Vacaciones y Familias es claro: acompañar a las familias desfavorecidas y monoparentales en sus proyectos de salida de vacaciones, a tarifas asequibles. En 2024, la asociación logró organizar la salida de 165 personas y acoger a 110 familias en el territorio. Estas cifras atestiguan el impacto positivo de la asociación, pero requiere más manos para orquestar las salidas, las acogidas y la logística general.
Una misión esencial que llevar #
El voluntariado tiene toda su importancia en esta estructura. El papel de los voluntarios es acompañar en la salida, acoger a la llegada, y ayudar con las compras cuando las familias no tienen medios de transporte. Los responsables de la asociación destacan que buscan todos los perfiles. “No es necesario estar presente todo el tiempo, puede ser solo puntualmente”, precisa Francelise Laventure. Cada minuto de voluntariado cuenta y puede cambiar la vida de una familia.
La voluntad de romper el aislamiento #
Floriane Bobin comparte una experiencia personal que refuerza su compromiso. «Me acababa de separar del padre de mis cinco hijos. Me fui a Aveyron para mis primeras vacaciones sola con mis hijos», recuerda. Esta experiencia le permitió reconectarse consigo misma y descubrir nuevas capacidades. En Francia, cerca de 2 millones de personas nunca han tenido la oportunidad de ir de vacaciones, una cifra alarmante que prueba que estas vacaciones no son simplemente un lujo, sino un derecho fundamental para todos.
Un temor por el futuro #
Los temores de Floriane y Francelise son claros: rechazar los proyectos de algunas familias por falta de voluntarios no es una opción viable. La posibilidad de no poder acoger o acompañar a las familias en sus salidas es un verdadero desafío para la asociación. Reforzar el equipo de voluntarios es, por lo tanto, crucial para seguir sirviendo a estas familias y ofrecerles momentos preciosos de evasión y felicidad.
Para aquellos que desean hacer una diferencia y unirse al equipo, es posible convertirse en voluntario contactando a la asociación a la siguiente dirección: [email protected].