Con 5853 kilómetros de costas salpicadas de calas, bahías y acantilados, Francia metropolitana ofrece un verdadero campo de juego para los apasionados de la inmersión submarina y la historia marítima. Entre las 6000 naufragios registrados, algunos nos cuentan relatos conmovedores y cautivadores, invitando a los aventureros a sumergirse en las profundidades para descubrir estos tesoros sumergidos. Aquí hay una selección de cinco naufragios fascinantes para explorar a lo largo de las costas francesas, donde cada inmersión es una verdadera aventura en el corazón de la historia.
Las costas francesas, con sus 5853 kilómetros de costas, calas y bahías, albergan una multitud de tesoros sumergidos y naufragios fascinantes. Ya sea que seas un buceador experimentado en busca de aventuras o un curioso deseoso de descubrir historias marítimas, estos cinco naufragios son imprescindibles para explorar en las profundidades de los mares. Cada uno cuidadosamente preservado, cuentan relatos de tiempos pasados y se han transformado en refugios para la fauna marina. Prepárate para un viaje inmersivo en las profundidades de los océanos, descubriendo estos vestigios de otro tiempo.
El USS Susan B. Anthony
¿Dónde? Port-en-Bessin-Huppain (14).
Su historia
Este transatlántico de la Grace Line, requisado en 1942 por la US Navy, fue renombrado en homenaje a la activista por los derechos de las mujeres. Al acercarse a Omaha Beach el 7 de junio de 1944, se encontró con una mina y se hundió, pero gracias a una evacuación bien organizada, la tripulación logró escapar.
La inmersión
Los buceadores pueden enorgullecerse de explorar la proa del barco, aún bien conservada, donde un cañón de defensa y dos mástiles de carga atraen una variedad de crustáceos y peces. La popa, dañada, también ofrece una visión fascinante de la historia militar.
El Laplace
¿Dónde? Frente a Fort-La-Latte (22).
Su historia
Este destructor estadounidense, ofrecido a Francia en 1947, encalló tras chocar con una mina alemana durante una trágica noche en septiembre de 1950. Su naufragio ha dejado huellas en la historia marítima de Francia.
La inmersión
Descansando entre 15 y 25 metros de profundidad, el naufragio desgarrado ofrece un fabuloso terreno de juego para los buceadores principiantes. Los restos del naufragio, colonizados por diversas especies marinas, son un hogar para las blénnidos y otros habitantes submarinos, y sus hélices y su timón permanecen notablemente intactos.
El África
¿Dónde? A 23 millas de Les Sables d’Olonne (85).
Su historia
El transatlántico francés de 119 metros de largo se hundió durante una tormenta en enero de 1920, con trágicas consecuencias: solo 34 sobrevivientes entre 602 pasajeros. Este naufragio no fue encontrado hasta la década de 1980.
La inmersión
Para los buceadores experimentados, este naufragio se encuentra a 48 metros de profundidad. Su proa bien conservada y sus calderas visibles son testigos de la magnitud del naufragio, y la vida marina que prospera allí hace que cada inmersión sea nueva y emocionante.
El Dalton
¿Dónde? Marsella (13).
Su historia
Construido en 1877, este carguero inglés se perdió con su carga de mineral durante una noche brumosa en febrero de 1928. Este naufragio ha dejado un eco en Marsella, testificando los desafíos de la navegación en condiciones climáticas difíciles.
La inmersión
A una profundidad de 33 metros, los buceadores pueden explorar partes bien conservadas del naufragio como la hélice y el timón, disfrutando de la diversidad marina que ha encontrado refugio en sus estructuras.
El Francia
¿Dónde? Annecy (74).
Su historia
Puesto en servicio en 1909, este barco de ruedas sirvió en el lago de Annecy hasta 1965, antes de hundirse en condiciones misteriosas en marzo de 1971. Los sospechas de fraude de seguros también rodean su desaparición.
La inmersión
Los buceadores pueden aventurarse entre mediados de abril y finales de octubre para descubrir este naufragio que descansa a 42 metros de profundidad. La exploración de su cubierta y sus salones, decorados con objetos de época, ofrece una inmersión única en la historia marítima. La visibilidad suele ser buena, haciendo que la inmersión sea accesible.
Nuestros consejos
- No penetres en un naufragio si eres claustrofóbico.
- Nunca te separes de tu compañero.
- Siempre mantén un ojo en un punto de salida.
- No bucees si no dominas tu flotabilidad, los sedimentos levantados pronto convierten el naufragio en una cueva oscura.
- En los rincones de un transatlántico, bucea con un hilo de Ariadna y dos linternas.
- No toques nada: cada trozo de metal puede ser afilado. Verifica la validez de tu vacuna contra el tétano.